Acuáticas y esteparias

 ¡Hola pechiazules!

Esta vez hemos estado por la Comunidad de Madrid. Nuestro objetivo era visitar, en el mismo día, dos ambientes diferentes: las artificiales lagunas asociadas al curso del Jarama al sur de la capital; y los extensos llanos de la alcarria madrileña. De esta forma iríamos principalmente en busca de aves acuáticas y esteparias. Noviembre es un mes muy interesante para acudir a cualquier humedal de la Comunidad de Madrid. Muchas especies de aves acuáticas acuden a estas láminas de agua para buscar refugio durante el invierno. Mientras en los llanos, las esteparias forman bandos numerosos para protegerse frente a posibles depredadores. ¿Queréis saber qué especies vimos? ¡Vamos a ver esa crónica!

Cuchara común (Spatula clypeata) izquierda y avutarda común (Otis tarda) derecha 

Salimos de la capital esquivando atascos y gente estresada, un contraste genial cuando sales a ver aves, porque te das cuenta de los reparadora que es esta afición. Nuestro primer destino uno de los muchos humedales catalogados de la Comunidad de Madrid que se sitúan junto al Jarama dentro del Parque Regional del Sureste. A pesar de su origen artificial estas lagunas son un lugar perfecto para la invernada de anátidas y otras aves acuáticas. 

Iniciamos un paseo y pronto pudimos ver la lámina de agua cubierta de cucharas comunes, algunos de ellos agrupados en bandos y alimentándose de una forma muy curiosa, en círculos. Este comportamiento les permite acceder mejor a algunos nutrientes. entre tanto movimiento frenético, los cormoranes secan el plumaje al sol, las "risas" de los zampullines resuenan entre la vegetación y fochas y porrones se sumergen en el agua. Todas las notas están correctamente en su pentagrama. También se ven garzas reales, aguiluchos laguneros, gallinetas, azulones, andarríos grande e incluso resuena el quejido del rascón, una especie que se deja ver muy poco, a pesar de que varios del grupo supliquen su aparición. 

Macho de cuchara común (Spatula clypeata)

Bando de cucharas comunes (Spatula clypeata) alimentándose entre porrones europeos (Ayhthya ferina) y un cormorán grande (Phalacrocorax carbo).

Macho de porrón europeo (Aythya ferina)

El humedal está a tope de vida y por si fuera poco, la parte del soto de ribera que escolta al Jarama se llena de vida. Mosquiteros, petirrojos, mitos, herrerillos, carboneros, pinzones, jilgueros y por si fuera poco también bandos de jilgueros lúganos alimentándose de las samaras. Esta especie es bastante curiosa porque no se reproduce en nuestro país y nuestra única posibilidad de disfrutar de su plumaje es ahora, en la temporada de otoño-invierno.

Hembra de jilguero lúgano (Spinus spinus)

Entre tanto revuelo de especies nuevas y no tan nuevas, una figura azulada parece sobre un palo en mitad de la vegetación palustre. ¡Es un martín pescador! Se ve perfectamente a través del telescopio y se aprecia su hermoso e intenso color. Es una maravilla. Pocas cosas podían eclipsar la visión de un martín pescador, pero, la presencia de un enorme bando de grullas capto todas nuestras miradas. La migración está reanudándose después de nuestra visita a la Laguna de Gallocanta. Muchos bandos han cruzado la península y muchos todavía quedan por llegar. Su griterío, sus giros y finalmente su formación en "V" son, sin duda, un comportamiento con el que perder la noción del tiempo. 

Martín pescador (Alcedo atthis)

Bando de grulla común (Grus grus)

Costó marcharse, pero debíamos cambiar de ambiente si queríamos probar suerte en los cultivos de cereal dela Alcarria madrileña. Solo se nos tenía que dar la mitad de bien para terminar de disfrutar del día.

Llegamos enseguida y nada más iniciar la ruta grandes bandos de estorninos nos daban la bienvenida. Levantaban el vuelo y se posaban en los labrados. Parecía que bailaban en el aire. A tanto estornino le acompañaban otras aves más pequeñas como lavandera blanca, cogujada común e incluso grupos de gorriones. Por suerte, en el mismo labrado, pudimos encontrar gorrión común, gorrión moruno y gorrión chillón. Concretamente este último fue una gran sorpresa y pudimos disfrutar mucho de ellos. Continuamos por el camino y al poco de avanzar vimos la silueta de dos avutardas en mitad del camino. Las pusimos en el telescopio y disfrutamos de su belleza. Cuando reparamos en la vegetación colindante nos dimos cuenta de que se trataba de un bando mucho más numeroso. Y después de varias pasadas para contar ejemplares, pudimos marcar en el listado 35 avutardas.

Bando de estorninos negros (Sturnus unicolor)

Gorrión chillón (Petronia petronia)

Macho de gorrión moruno (Passer hispaniolensis)

Avutarda común (Otis tarda)

Cogujada común (Galerida cristata)

Se portaron de maravilla, estuvieron muy cerca y apenas levantaron el vuelo a pesar de nuestra presencia. Las que no paraban eran cogujadas, alondras y calandrias, muchas calandrias. Bandos enormes de calandrias inquietas, de aquí para allá y viceversa. Y no era para menos, una hembra de esmerejón había hecho su entrada triunfal en escena para el pánico de los aláudidos y fringílidos residentes.

En el cielo volvimos a cruzarnos con un nuevo bando de grullas. Esta vez unas pocas e incluso dos solitarias gritando al grupo que iba de avanzadilla: "¡Eh! ¡Esperen!, ¡Eh! ¡Esperen!". Con ellas volaban buitre negro y varios buitres leonados. No es raro verlos moviéndose por estas tierras en busca de algo de alimento. Así también vimos a milanos y busardos ratoneros. Eso perturbaba constantemente la tranquilidad de unas perdices que se alimentaban tranquilamente en un labrado cercano al camino. Cada vez que una silueta pasaba por encima, véase urraca, cuervo, grajilla o rapaz, se agachaban para pasar desapercibidas. Además de los córvidos mencionados también pudimos ver un buen grupo de chovas piquirrojas alimentándose entre barbechos y levantando el vuelo junto con avefrías y estorninos. 

Perdiz roja (Alectoris rufa)

Avefría europea (Vanellus vanellus)

Cuando parecía que no podíamos seguir viendo más cosas, encontramos un nuevo grupo de avutardas. En este caso era un bando mucho más compacto y pudimos contarlas bien, 37 avutardas, por lo que junto con el bando de 35 que vimos al inicio del camino hacen un total de 72 ejemplares. Es la primera vez que contamos tantas avutardas en este lugar desde que hacemos visitas a este espacio y vamos todos los años al menos 3 o 4 veces. Siguiendo datos antiguos no es el número más alto de avutardas reportado. Hasta 110 ejemplares se citaron en 2019.

Avutarda común (Otis tarda)

Buen final para un día magnifico de buen tiempo y un total de 56 especies observadas en 3 horas y media de visita. Nos íbamos contentos sobre todo por la calidad de las observaciones y por habernos cruzado con bandos de grullas en migración pero en general por haber disfrutado de la tranquilidad de las lagunas del sureste y los llanos alcarreños.

¡Hasta pronto pechiazules!

Excursiones de Birdwatching con Blue Nature Briding and Nature Tours SL

Los mejores tours ornitológicos a lo largo de la geografía española.

España, uno de los mejores destinos para ver aves de Europa. Su situación a mitad de camino entre el Viejo Continente y África le confieren un clima ideal y una variedad de especies sin parangón en el resto de Europa

Si quieres realizar una de nuestras excursiones estándar en otra fecha, visitar otro lugar, hacer un tour más fotográfico o ir en busca de especies concretas, puedes diseñar tu experiencia a la carta. Sean cuales sean tus requisitos, estaremos encantados de ayudarte.

Diseña ruta a la carta.